Síndrome de salida torácica

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Las actividades y pasatiempos son importantes para usted. Pero cuando siente dolor o debilidad en el cuello, el hombro, el brazo o la mano, esto puede impedirle vivir bien. Estamos a disposición para ayudarle. Utilizamos las técnicas más modernas y menos invasivas para diagnosticar y tratar con precisión el síndrome de salida torácica (TOS), para que pueda volver rápidamente a disfrutar de las cosas que le gustan.

¿Qué es el síndrome de la abertura torácica superior?

La abertura torácica superior es la zona entre la clavícula y la primera costilla. Cuando los vasos sanguíneos o los nervios de esta zona se comprimen, se lesionan o se irritan, pueden causar un grupo de trastornos llamado síndrome de la abertura torácica superior. Los trastornos generalmente se agrupan según la parte del cuerpo afectada: arterias, venas o nervios.

Aunque el síndrome de la abertura torácica superior puede ocurrirle a cualquiera, es más común en atletas, mujeres y personas de entre 20 y 40 años.

Si no se trata, el síndrome de la salida torácica superior puede causar complicaciones graves, como coágulos de sangre o embolia pulmonar, una afección potencialmente mortal que ocurre cuando un coágulo de sangre viaja a los pulmones y bloquea repentinamente el flujo de sangre. El síndrome de la abertura torácica superior también puede causar daño permanente a los nervios.

Síntomas del síndrome de la abertura torácica superior

El síndrome de salida torácica (TOS) típicamente causa síntomas en la parte superior del cuerpo, específicamente en el cuello, los hombros, los brazos y las manos. Las personas con síndrome de salida torácica pueden sentir dolor, entumecimiento, hormigueo o debilidad en estas áreas. Si los síntomas del síndrome de la abertura torácica superior le están afectando las venas o arterias, es posible que tenga:

  • Hinchazón de los brazos, las manos y los dedos
  • Entumecimiento, hormigueo o dolor en los dedos
  • Mano o dedos azulados o pálidos
  • Dedos, manos o brazos fríos
  • Debilidad en el cuello o el brazo

Si afecta los nervios, puede sentir:

  • Dolor, hormigueo o debilidad en el cuello, el hombro, el brazo o la mano
  • Entumecimiento o debilidad en la mano o los dedos
  • Debilitamiento del agarre

Causas del síndrome de la abertura torácica superior

Los vasos sanguíneos o nervios comprimidos o lesionados en la abertura torácica superior, que se encuentra entre la clavícula y la primera costilla, causan el síndrome de la abertura torácica superior. Es posible que los médicos no siempre sepan por qué ocurre la compresión, pero las causas más comunes pueden ser:

  • Lesiones por un accidente automovilístico u otro accidente
  • Movimiento repetitivo por actividades deportivas o laborales
  • Mala postura
  • Presión en las articulaciones por tener sobrepeso o cargar objetos pesados, como una mochila
  • Tener una costilla adicional
  • Embarazo, que puede aflojar las articulaciones

Diagnóstico del síndrome de la abertura torácica superior

Para diagnosticar el síndrome de la abertura torácica superior, comenzaremos con un examen físico completo y revisaremos sus antecedentes médicos y síntomas.

Las pruebas que podríamos ordenar incluyen:

  • Imágenes, como radiografía, ecografía, tomografía computarizada o resonancia magnética, para obtener imágenes de las costillas, los vasos sanguíneos y el área de la abertura torácica superior
  • Pruebas vasculares, como angiografía con radiografía y medio de contraste, para revelar la ubicación de cualquier compresión de los vasos sanguíneos
  • Estudios de los nervios para evaluar la función nerviosa

Obtenga más información sobre nuestras pruebas y diagnóstico cardíaco y vascular.

Tratamiento del síndrome de la abertura torácica superior

Cuando el síndrome de la abertura torácica superior se trata en forma temprana, lo único que probablemente necesitará para tratar sus síntomas es fisioterapia y alivio del dolor. Su plan para tratar los síntomas del síndrome de la abertura torácica superior puede incluir:

  • Medicamentos para disminuir la inflamación, aliviar el dolor, relajar los músculos o prevenir y disolver los coágulos de sangre
  • Fisioterapia para aprender ejercicios para fortalecer los músculos y aliviar la presión sobre los vasos sanguíneos y nervios, aumentar el espectro de movimiento y mejorar la postura

A veces, si otros tratamientos no son efectivos y sus síntomas de síndrome de la abertura torácica superior continúan, es posible que recomendemos cirugía. Nuestros especialistas vasculares hablarán con usted para determinar las mejores opciones quirúrgicas.

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